
La historia de Edwin Howard Armstrong, nacido un 18 de diciembre de 1890, es la de un genio envuelto en tragedia. Plagios de compañeros, y por supuesto, de grandes corporaciones como RCA y AT&T, llevaron a este personaje, creador de la frecuencia modulada, al suicidio en 1954.
Conocido como el “padre” de la radio FM, Edwin Armstrong tuvo una infancia parecida a la de otros visionarios. A los ocho años le fue diagnosticada corea de Sydenham, un trastorno infeccioso neurológico poco frecuente, pero grave, que se caracterizó por un tic físico exacerbado por la emoción o el estrés. La situación lo obligó a dejar la escuela pública, por lo que su familia decidió vivir lejos de su natal Nueva York en una casa a orillas del río Hudson. Fue en el ático de esta residencia donde Armstrong inició su carrera en la ciencia.
Más tarde, en 1909, se matriculó en la Universidad de Columbia, donde estudió ingeniería eléctrica con maestros como Michael Pupin, inventor de las bobinas de carga de telefonía. Convencido de que el conocimiento y el avance tecnológico era fruto de la experimentación y el razonamiento, cuestionó a profesores e incluso se cuentan episodios de desfachatez temeraria, como dar una descarga eléctrica severa engañando a un profesor con el que no simpatizaba.
Sus años universitarios quedaron marcados por la invención de sus primeros desarrollos, que comenzaron con el circuito regenerativo que patentó en 1914, apenas un año después de graduarse. Las patentes, o mejor dicho, la disputa por estas, terminarían siendo clave en la debacle de Armstrong.
Dos años después, el inventor Lee De Forest patentaría también el circuito regenerativo, lo que dio inicio a una disputa que se extendería 12 años y que culminó en el Tribunal Supremo de Estados Unidos con el fallo en contra de Armstrong. Hoy, la resolución es recordada como “un malentendido técnico”.
Pese al desgaste de las disputas, el genio de Armstrong no paró, y fue en 1933 que desarrolló la modulación de la frecuencia, que en vez de variar la amplitud de una onda de radio para crear un sonido, variaba la frecuencia de la onda portadora. Esa tecnología, conocida de manera popular como FM, fue su gran legado. Lo patentó en 1933 y, para probar su utilidad tecnológica, logró que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) creara una banda de radio FM entre los 42 y 49 MHz.
Fuente: Yahoo
Categorías:Efemeride
Deja una respuesta